La voluntad de los empleados de tomar medidas para mantener el esquema de trabajo pesado, que garantiza que las personas con trabajos físicamente exigentes puedan dejar de trabajar antes, está creciendo rápidamente.
Tras el anuncio de huelgas en el transporte urbano de La Haya (HTM), Rotterdam (RET) y Amsterdam (GVB) el 10 de septiembre, otros sectores gubernamentales también declaran su solidaridad con estas acciones. Esto significa que pronto se sentirá el impacto en la vida cotidiana de los ciudadanos, con huelgas previstas en varios sectores de todo el país.
La huelga del transporte urbano del 10 de septiembre marca el inicio de una semana llena de acciones. De 04:00 a 08:00 horas, autobuses, tranvías y metros pararán en las tres principales ciudades. Eric Vermeulen, director de FNV Stadstransport, destaca que los empleados de este sector estaban preparados para actuar desde el principio. “Ellos se dan cuenta mejor que nadie de lo importante que es para su salud y su futuro contar con un sistema de trabajo pesado mejor y permanente. Si tienes un trabajo exigente, simplemente deberías poder dejar de trabajar antes”, afirma Vermeulen.
arreglo de trabajo pesado
La voluntad de actuar no sólo está creciendo en el transporte urbano; Los empleados de otros sectores gubernamentales también están mostrando su apoyo. “A nuestra acción también asistirán personas de sectores como las empresas municipales de limpieza y agua”, afirma Vermeulen. Esta solidaridad subraya la importancia de una mejora estructural de las regulaciones sobre el trabajo pesado para todo el sector público. Según Vermeulen, no se puede descartar que pronto se adopten medidas en otros sectores.
El plan de trabajo pesado es vital para las personas con profesiones físicamente exigentes, como conductores y maquinistas, porque les permite jubilarse antes. A pesar de las recientes declaraciones del ministro, que espera que se encuentre una solución cuando expire la relajación fiscal del régimen, la voluntad de hacer huelga está aumentando. Vermeulen deja claro que las acciones del transporte urbano son las primeras que realmente molestarán al público, pero subraya que es necesario. “Un mejor y permanente régimen de trabajo pesado es una cuestión de justicia y seguridad para todos estos empleados”.
El 11 de septiembre, un día después de la huelga del transporte urbano, los empleados de los Ferrocarriles Holandeses (NS) y del transporte regional también dejar el trabajo, nuevamente entre las 04:00 a. m. y las 08:00 a. m. La FNV destaca que en el acuerdo de pensiones se ha llegado a un acuerdo sobre una buena solución para los trabajos pesados y sigue insistiendo en un régimen permanente y mejorado.
La situación en la NS es terrible. La Federación Holandesa de Sindicatos (FNV) ha anunciado oficialmente que los empleados de NS harán huelga el 11 de septiembre. Esta huelga es un resultado directo de la creciente insatisfacción entre los empleados por el actual acuerdo de trabajo pesado, que expira en 2025. Karel de Buijzer, director de la FNV, habla de una “doble irregularidad” a la que se enfrenta el personal: horarios irregulares que cambian a menudo y un trabajo físicamente exigente. "No puedes seguir así hasta los 68 años", dice De Buijzer. La doble carga del esfuerzo físico y del estrés mental hace que la situación sea insostenible para muchos empleados de NS.
más acciones
El llamado a la acción cuenta con un amplio apoyo entre los empleados de NS. Cada vez más empleados se apuntan para coordinar la huelga del 11 de septiembre. La señal es clara: los empleados están decididos a aplicar un régimen de trabajo pesado permanente y mejorado. Quieren garantizar que quienes han trabajado duro durante años tengan la oportunidad de jubilarse anticipadamente y así salvaguardar su salud y bienestar.
El paro laboral en la NS es parte de una ola más amplia de acciones planeadas en la semana previa al Día del Presupuesto. Por ejemplo, está prevista una huelga en la industria de la limpieza para el 9 de septiembre, seguida de un paro laboral en el transporte urbano el 10 de septiembre. Además de la NS, los empleados de los sectores de la construcción y del metal también dejarán de trabajar el 11 de septiembre. Estas acciones coordinadas tienen como objetivo aumentar la presión sobre los empleadores y el gobierno y dejar claro que los acuerdos actuales no son suficientes para aliviar la carga de trabajo y la inseguridad en muchos sectores.